De la misa participaron unas 150 delegaciones y 200.000 de fieles en lo que significó el inicio de un nuevo papado, en la oportunidad, León XIV recibió los símbolos del poder papal: el palio y el Anillo del Pescador, y pronunció un llamamiento a la unidad en la iglesia y la paz en un mundo marcado por "demasiado odio y prejuicios".
El presidente Peña comentó que aprovechó el breve encuentro para transmitir al Santo Padre el cariño del pueblo paraguayo, “un pueblo mariano, muy devoto de la Virgen de Caacupé y mayoritariamente católico que lo espera”.
El jefe de Estado paraguayo estuvo acompañado del presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre.
En su primera homilía, León XIV lamentó la situación de la "atormentada Ucrania" y el Vaticano anunció que se reunirá durante la jornada con Zelenski; también dedicó unas palabras a los niños, las familias y los ancianos que "están pasando hambre" en Gaza.
Fuente: ip.gov.py
wdm.
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