Según relataron los vecinos del lugar, dos hombres descendieron de la nave y abordaron a personas que pasaban por la zona, a quienes dijeron haber sufrido una falla mecánica, ofrecieron dinero a cambio de un traslado al pueblo y, al ser rechazados, se internaron a pie entre los campos, este comportamiento sumamente irregular, encendió las alarmas.
Tras ello se montó un operativo cerrojo encabezado por efectivos de la Comisaría 11va de Estación Díaz, con apoyo de móviles policiales de la Unidad Regional XI y personal de la Dirección General de Seguridad Vial. La búsqueda se extendió por caminos rurales y senderos, en un despliegue que interrumpió la habitual tranquilidad del entorno agrícola.
El jefe de zona coordinó las tareas desde el terreno y comunicó los primeros datos a la fiscal federal Natalia Palacín, quien dio luz verde a las actuaciones preliminares, luego de más de dos horas de búsqueda, la escena cambió: alrededor de las 20:50, los agentes lograron encontrar a los dos hombres ocultos bajo una maquinaria agrícola, a unos 700 metros del punto donde había quedado la avioneta.
Ambos fueron reducidos sin resistencia y la policía confirmó que se trata de dos ciudadanos extranjeros: uno de nacionalidad peruana y el otro boliviana.
Durante la inspección del interior de la aeronave, no se encontraron drogas ni mercadería ilegal, pero sí se hallaron bidones con combustible.
Este detalle, aparentemente menor, cobra relevancia en la investigación: podría indicar que el vuelo no era meramente recreativo ni accidental.
Por ahora, la Justicia Federal y la Unidad Regional XI manejan varias hipótesis: desde vuelos clandestinos, hasta actividades vinculadas al contrabando o al narcotráfico.
El uso del espacio aéreo de forma irregular se ha convertido en una preocupación creciente en distintas zonas rurales del país.
Fuente: ellitoral.com
wdm.
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