En una ceremonia oficial efectuada este sábado en la ciudad portuaria de Bandar Abas, en el sur del país, con la presencia del general de división Amir Hatami, comandante en jefe del Ejército de Irán y del almirante Shahram Irani, comandante de la Armada, la base flotante “de la República Islámica de Irán, Kurdistán” fue incorporada a la Fuerza Naval del Ejército.
La base flotante “Kurdistán” fue introducida como una “ciudad–puerto” capaz de desempeñar funciones estratégicas de apoyo logístico a las unidades de combate de la Armada en alta mar, así como prestar asistencia a otras fuerzas y organizaciones que lo requieran.
Durante el acto, celebrado con motivo del Día Nacional de la Armada, también se presentó nuevamente el destructor “Sahand”, junto con lanchas rápidas lanzamisiles, vehículos aéreos no tripulados multipropósito, plataformas submarinas no tripuladas inteligentes y diversos sistemas de guerra electrónica, misiles e inteligencia de uso costero y naval.
Estas incorporaciones tienen como objetivo reforzar la capacidad de combate naval, demostrar los avances técnicos, desarrollar sistemas de armamento acordes con las amenazas actuales, impulsar la innovación en diseño, aumentar la profundidad estratégica y ampliar el acceso a aguas internacionales.
Con este nuevo armameneto, el destructor Sahand y la base flotante Kurdistán, la Armada incrementará su capacidad operativa y su presencia en mares lejanos.
Según detallaron los medios locales, el buque de guerra furtivo Sahand, de fabricación iraní, es la tercera unidad de la clase Mowj, fue botado por primera vez en 2018 y está equipado con una cubierta de vuelo para helicópteros, lanzatorpedos, cañones antiaéreos y antibuque, misiles tierra-tierra y tierra-aire y capacidades de guerra electrónica.
Fuente: HispanTV
wdm.
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