
La manifestación, en la que participaron italianos llegados de todo el país, se realizó bajo el lema "Basta de cargas para los más débiles" y "Ya hemos dado suficiente", remarcaban las consignas.
El personal del Coliseo y de los Foros Romanos abandonó sus puestos, obligando al cierre de dos de los principales atractivos turísticos de Roma, además, la marcha también dificultó el tránsito en la hora pico de la capital italiana.
El gobierno respondió a través del ministro de Administraciones Públicas, Filippo Patroni Griffi, quien pidió a los huelguistas que se sienten a la mesa de negociaciones.
Monti subió los impuestos y rebajado las pensiones, sometiendo de esta manera a los italianos a una cantidad de sacrificios sin precedentes, como lo reconocó él mismo esta semana.
Fuente: Ambito - Europapress
wdm.
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